Para algunos será difícil de creer, pero en la India hay más de 160 mil casos documentados científicamente de personas que lograron transformar su cuerpo físico en cuerpos de luz.
"Para lograrlo, una persona tiene que ser capaz de liberar su cuerpo a la luz teniendo solo pensamientos amorosos, entre otras cosas, por supuesto. Se cree que cada cinco años en promedio, un monje budista avanzado entra en este estado iluminado".
"Este proceso es extremadamente poderoso y se dice que semanas antes de poder lograr esta transformación, algunos monjes budistas pueden grabar su mano o pie en una pared. Según los informes, un cuerpo tarda alrededor de 7 días en encogerse, disolverse en luz y trascender".
Un investigador viajó al Tibet (India) a verificar, y esto fue lo que documentó:
"El 29 de agosto de 1998, en el Tíbet, Khenpo Achö, de 80 años de edad, alcanzó la disolución física. Al mediodía, acostado en la cama, sin haber sufrido ninguna enfermedad reciente, mientras estaba en la postura de un león dormido y recitando el mantra de seis sílabas, alcanzó a Buda en la matriz básica primordial de pureza alfa. Cuando su cuerpo se disolvió en luz, sus arrugas desaparecieron, parecía un niño de ocho años con una hermosa tez. Transcurrida una semana, cuando la gente se enteró de su muerte, realizaron su puja de muerte en secreto para engañar a las autoridades, y en ese momento, aparecieron arcoíris por dentro y por fuera, y un agradable aroma impregnaba el lugar. Su cuerpo disminuyó gradualmente de tamaño y, al final, alcanzó a Buda; ni siquiera sus uñas y su cabello quedaron atrás. Era como un pájaro volando desde una roca: las personas cercanas no tienen idea de dónde podría haber ido".
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