viernes, 15 de septiembre de 2017

Enfrentando esos momentos...

Hoy festejamos el Día del Maestro en el Centro Rural 135, de Virrey del Pino.
Venía toooodo bien, hicimos el clásico juego de pisar los globos de los otros, y el último gana, que estuvo re divertido y me reí y disfruté un montón!
Luego, nos pusimos en ronda y había que pasar un paquete mientras se escuchaba una música, y cuando la música se detuviera el que tenía el paquete debía abrirlo y leer el papelito adentro, que era una prenda.
-Uf... -pensé- con lo que detesto estas cosas...
Todo empezó, y no va y me detienen la música justo para que me quede con el paquete...
El caso es que al abrirlo no entendía como se abría, me puse nervioso sabiendo que mi cabeza no da con esos protocolos sociales, trato de evitarlos porque no los entiendo, pero bue... ya estaba ahí...
Y la prenda decía: "Mientras baila, debe cantar una canción cambiándole la letra para que sea graciosa, durante 1 min". La $#@\}ç!!! NO PUEDO CANTAR EN PÚBLICO! NO PUEDO CANTAR CANCIONES! ¿?
Así que me mandaron al centro de la ronda, me dieron el micrófono, y empezaron a alentarme para que cante, todos esperando que cante algo gracioso... y en mi cabeza no había absolutamente ninguna canción... y encima pusieron una canción de fondo, uf...
Después de aquella enfermedad que tuve me ha resultado muy difícil memorizar canciones nuevas, de algún modo solo me han quedado algunas canciones de mi infancia, de las infantiles, folklore, románticas, etc., pero... no me quedan las letras nuevas, toda una historia que nadie me entendería y que solo pensaba hablar de eso al jubilarme.
Así que me sentí para el traste y solo quería irme, me sentí avergonzado, humillado.
Para colmo ya me han dicho que el 9 y 10 tengo que ir de campamento con la escuela; a ver ¿quién me paga las horas extras que le estaría dando al centro? ¡nadie! además, no me consultaron si tenía disponibilidad, y en esos días estoy ocupado con la tecnología de plasma, y el posible arribo de Martín a Capital, con quien tengo tanto trabajo que hacer.
Pero... no tengo protocolos laborales o sociales para un campamento, es decir, tratándose de eso JAMÁS en mi vida estuve en un campamento,  y hace 26 años que no participo de algo así, en mi cabeza no hay canciones, ni bailes, ni fogón, ni juegos para campamentos, y para peor he intentado meterme canciones para el fogón, pero sencillamente no quedan.
Con los juegos puedo tranquilamente, es cuestión de leer algunos y empezar a crear actividades, hasta que en mi mente queden, porque me volví muy creativo después que se me borrara el disco, y sí puedo con las actividades, pero... necesito ver algunas, entender los tiempos de un campamento, porque no tengo nada de eso, es más el miedo que me da que otra cosa.
En fin... sé que debo enfrentar mis miedos... así que en ese camino voy, pero de las canciones de campamento, no creo que pueda memorizar algunas.
Ufa...

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